Los niños que son atendidos en el Centro Abierto están expuestos a los peligros que rodean la calle donde es necesario el cerco solicitado. Una primera barrera fue colocada hace varios años de manera precaria para delimitar el terreno que corresponde a la calle de ingreso al Hogar de Adultos Mayores (terreno que linda con el Centro Abierto), por donde circula diariamente una cantidad importante de personas y vehículos, dejando a los niños expuestos. Actualmente está delimitada por láminas que se improvisaron para delimitar el cerramiento perimetral. Se trata de una solución temporal hasta que se pueda solucionar este problema.

Las Hermanas están decididas a brindarles a los niños la seguridad y protección que necesitan para que puedan utilizar este espacio de recreación sin límites. Las Hermanas y los niños necesitan esa seguridad y protección de los delincuentes que pululan por las calles pescando cualquier cosa que tenga valor que pueda hacerles pasar un mal rato a los niños y a las Hermanas. Hemos sido víctimas de robos constantes debido al fácil acceso al mismo, lo que nos pone en una situación de alarma.

La alternativa del Centro Abierto sirve como refugio para niños en riesgo entre 4 y 15 años. En él, los niños redescubren el sentido de la vida a través del apoyo de las hermanas, asistiendo a la escuela, aprendiendo oficios y superando, mediante sesiones de terapia, los traumas adquiridos durante la infancia a través de profesionales. Los padres que no tienen un lugar donde dejar a sus hijos de manera segura para poder ir a trabajar con tranquilidad, cuentan con esta alternativa de protección donde los niños reciben toda la atención necesaria, así como el apoyo psicológico y escolar necesario para que puedan prosperar.

Objetivo del proyecto

$10,000.00

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